ANCLAR EN EL PUERTO PARA LUEGO BUSCAR EL HORIZONTE

 

ANCLAR EN EL PUERTO PARA LUEGO BUSCAR EL HORIZONTE

 

Hoy me siento como un barco sin rumbo,

navegando en el mar de la vida,

las olas de la soledad me golpean,

y no hay salvavidas en forma de boca,

que me diga tranquilo conserva la calma,

miro el cielo y es oscuro,

anuncia que se avecina una tormenta en mi corazón,

y solo yo puedo verla,

lo bueno es que la tormenta siempre pasa,

lo malo es que a veces los barcos se hunden,

y este barco no se ha hundido aun,

porque tiene la esperanza de que llegara algún puerto,

donde encuentre la tranquilidad de la tarde cuando se pone el sol en los ojos de alguien,

 y es que todos los barcos necesitan llegar algún puerto,

necesitan recargarse para seguir navegando,

necesitan anclar para descansar de las travesias, 

para poder  llenarse de energía y reparar las averías y daños ocasionados durante su estancia en el agua,

todos somos barcos buscando puerto,

y siempre hay un puerto a donde llegar,

pero tenemos que navegar hacia el,

la vida es el mar,

las tormentas son los momentos dificiles,

y los instantes felices están en el horizonte,

que es hacia donde todos los barcos buscan llegar,

aunque a veces no lo consigan.

LUIS RODRIGUES