LA ULTIMA PALABRA
debemos darle respiración boca a boca,
abrazarlo todos los días,
mantenerlo vivo a toda costa,
si soñamos ser poetas,
tenemos que desayunar, almorzar y cenar libros,
y hacer una rutina de ejercicios,
donde la mano se mueva para escribir ni que sea pendejadas,
pero que se mueva para escribir,
debemos hacer el amor con las palabras,
y con las mujeres principal mente con ellas,
dejar que alguna frase de Sabines nos hipnotice,
leer a Neruda en el maremoto de Chile,
o a Benedetti en alguna esquina rota,
y es que un escritor profesional es un novato que no se rinde,
o lo que es lo mismo un soñador que no ha dejado de luchar por hacer realidad su sueño,
soy ese novato que no se rinde,
soy ese soñador que no ha dejado de soñar,
y por eso sigo escribiendo poesía,
para que el silencio no tenga la ultima palabra.
LUIS RODRIGUES
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